Publicado: Buscabiografias
(30/03/1853 - 29/07/1890)
Pintor holandés
Nació el 30 de marzo de 1853 en Groot-Zunder, hijo de un
pastor protestante holandés.
Con 27 años ya había trabajado en una galería de arte, había
dado clases de francés, había sido estudiante de teología y evangelizador entre
los mineros de Wasmes, en Bélgica. Sus experiencias como predicador se pueden
observar en sus primeras composiciones sobre campesinos, de las cuales la más
conocida es la tosca y directa Los comedores de papas (1885, Museo Vincent van Gogh, Amsterdam,
Holanda), uno de los diez únicos grabados que el pintor hizo a lo largo de su
carrera.
Oscuras y sombrías, a veces descarnadas, sus primeras
composiciones ponen en evidencia el intenso deseo de expresar la miseria y los
sufrimientos de la humanidad tal y como él los vivió entre los mineros de
Bélgica.
En 1886 viaja a París para vivir con su hermano Théo van
Gogh, que era marchante de arte, y allí se familiarizó con los nuevos
movimientos artísticos que estaban en pleno desarrollo. Recibió gran influencia
de la obra de los impresionistas y por la de los grabadores japoneses como Ando
Hiroshige y Hokusai, comenzó a experimentar con las técnicas de la época. Más
adelante adoptó los brillantes matices pictóricos de artistas franceses como
Camille Pissarro y Georges Seurat.
En 1888 abandono la capital francesa para trasladarse al sur
de Francia con la esperanza de atraer allí a algunos de sus amigos y fundar con
ellos un Taller del Mediodía. Bajo el sol ardiente de la Provenza, pintó
escenas rurales, cipreses, campesinos y otras características de la vida de la
región. Durante ese periodo en el que vivió en Arles, empezó a utilizar las
pinceladas ondulantes y los amarillos, verdes y azules intensos relacionados
con obras tan conocidas como Dormitorio en Arles (1888, Museo Vincent van Gogh)
y Noche estrellada (1889, Museo de Arte Moderno, Nueva York, Estados Unidos).
Son también de esta época Descargadores en Arles (1888) y Les Vessenots en
Auvers (1890), ambas en el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid (España). Para él
todos los fenómenos visibles, los pintara o los dibujara, parecían estar
dotados de una vitalidad física y espiritual. Logró contagiar su entusiasmo al
pintor Paul Gauguin, al que había conocido en París, para que fuera a verle a
Arles. Tan sólo les duró dos meses la paz y la armonía ya que después empezaron
a tener violentos enfrentamientos que culminaron en una pelea en la que Van
Gogh, fuera de sí, amenazó a Gauguin con una navaja; esa misma noche, sumido en
un profundo remordimiento, Van Gogh se cortó parte de la oreja.
Pasó algún tiempo internado en un hospital de Arles y un año
en el manicomio de Saint-Rémy, situado en esa misma región. Durante ese periodo
siguió trabajando entre los varios ataques de locura que sufrió. Más tarde pasó
tres meses en Auvers atendido por un médico cordial cuyo retrato pintó (El
doctor Paul Gachet, 1890, Museo de Orsay, París). Vincent van Gogh padeció de
muchos problemas físicos debido, en parte, a la pobreza y a la desnutrición.
Fue adicto a la caña de ajenjo, peligrosa bebida narcótica popular a finales
del siglo XIX. Parece ser que padeció sífilis, tinnitus, envenenamiento por
plomo, síndrome de Meniere y de epilepsia. Sus dos hermanos murieron jóvenes y
su hermana, Wilhelmina, pasó la mayor parte de su vida en un asilo mental.
Inmediatamente después de acabar su inquietante Cuervos
sobre el trigal (1890, Museo Vincent van Gogh), se disparó un tiro en el
estómago el 27 de julio de 1890. A pesar de su herida se arrastró de vuelta a
la casa donde murió dos días después en brazos de su hermano Theo. "Yo
arriesgué mi vida por mi trabajo, y mi razón siempre fue menoscabada":
estas son las palabras de Vincent en su última carta encontrada en su bolsillo
en Julio 29, 1890.
Realizó cerca de 750 cuadros y 1600 dibujos.
Los girasoles
Noche estrellada
Los comedores de patatas